La cuestión de la identidad corporativa de las empresas hoy día no es moco de pavo. Créenos si te decimos que la importancia de los valores y la imagen construida de una empresa tiene tal valor en este mundo tecnológico, que incluso ha trascendido a muchos usuarios particulares de redes sociales como Instagram, hiper preocupados por la imagen que dan.
Muchos usuarios de redes sociales cuidan la imagen que dan ellas reflejando valores y estrategias concretas.
En este asunto tiene mucho que ver el boom digital, el excepcional toque de la viralidad y las exigencias de un nuevo modelo de diseño, más voluble, interactivo y dinámico.
Esta nueva forma de afrontar el escaparate que supone la identidad corporativa de una empresa, abre un abanico de posibilidades que van más allá de los modelos tradicionales de identificación visual.
Es necesario tratar con cuidado la imagen corporativa
Identidad corporativa y branding fetén
Piensa una marca que se te venga a la cabeza. A ver, ya sabemos que la primera ha sido Blubber, pero te damos la libertad de tu mente abra la puerta a otras…
Tras este lapsus y poniéndonos un poco serios (solo un poco), entendemos que se te han venido a la mente más de una. Aquellas marcas que son fácilmente reconocibles tienen a sus espaldas una buena estrategia de marketing complementada con una identidad corporativa y un diseño gráfico potente.
Dicho esto, si se acierta desde el principio con una identidad y una estrategia de branding bien encaminada, puedes llegar a conseguir más éxito en poco tiempo que «¡la Rosalía!» (leáse con su tono correspondiente).
¿Qué beneficios obtienes?
La mejor cara de la fiesta
Una exposición buena de la marca hará que tus clientes y proveedores confíen en ti porque dispones de una imagen visual profesional y competitiva. Una joya, vaya.
Ser su nuevo dios
Generarás credibilidad y el cliente te reconocerá por quién eres, además de por lo que vendes, claro.
Nuevos clientes en el bote
Ser atractivo tiene su parte buena, ligas con mayor facilidad. Eso pasa si tienes una identidad corporativa potente y fiable.
En este caso, un buen ejemplo de identidad corporativa potente es la que hace Netflix con sus series de producción propia. Creando contenidos con iconografía definida y generando cápsulas complementarias a los capítulos de las series, para optimizar su estrategia de marketing.
Bien recordado
Si consigues ser una marca en boca la gente, lo has hecho bien.
Representa valores
Los valores corporativos son creencias que se generan en torno a una identidad corporativa y que se materializa en todo lo visual. ¡Tenlos en cuenta!
Buenos tiempos (o no) para la imagen corporativa
Ya hemos hablado de beneficios de tener una identidad corporativa bien pensada desde el principio con una estrategia de branding bien diseñada. Esos principios deberían grabarse en la mente de todo aquel que quiera estar en el nuevo universo al que se enfrentan las empresas.
La globalización ha permitido que el contenido que se genera llegue a más personas
Ahora nuestra marca tiene la posibilidad de alcanzar lugares insospechados en cuestión de minutos. Esto hace que, sin ir más lejos, este post lo esté leyendo alguien en nuestras antípodas. Con este panorama debemos pensar que nuestro mensaje está llegando a distintas culturas y que nuestra identidad corporativa ahora forma parte de la globalización.
Por ello es necesario tratar con cuidado la imagen corporativa y ser conscientes de la importancia de un buen diseño y una correcta gestión de la imagen corporativa en todas sus vertientes. Porque hoy en día estamos más expuestos que nunca a ser juzgados a tan solo un golpe de click y eso también debemos tenerlo en cuenta.
